Clasificación de los OS

Los sistemas operativos (SO) pueden clasificarse de diversas maneras según sus características y funcionalidad. A continuación se presenta un resumen de las principales clasificaciones basadas en el documento:

1. Por número de usuarios

  • Monousuario: Permite que un solo usuario interactúe con el sistema a la vez (ejemplo: MS-DOS).
  • Multiusuario: Permite que varios usuarios trabajen simultáneamente en el sistema, gestionando recursos de manera eficiente (ejemplo: Linux, Unix).

2. Por número de tareas

  • Monotarea: Solo ejecuta un proceso a la vez (ejemplo: sistemas operativos antiguos como MS-DOS).
  • Multitarea: Permite la ejecución de múltiples procesos simultáneamente, compartiendo los recursos del sistema (ejemplo: Windows, macOS).

3. Por número de procesadores

  • Uniproceso: Utiliza un único procesador para ejecutar las tareas.
  • Multiproceso: Emplea varios procesadores, ya sea de manera simétrica (todos los procesadores ejecutan tareas de forma independiente) o asimétrica (un procesador gestiona las tareas y distribuye la carga a los demás).

4. Por propósito

  • De propósito específico: Diseñados para realizar tareas concretas (ejemplo: sistemas embebidos en electrodomésticos o dispositivos médicos).
  • De propósito general: Pueden ejecutar múltiples tipos de aplicaciones y tareas (ejemplo: sistemas operativos de PC como Windows o Linux).

5. Por diseño

  • Monolítico: Todos los componentes del SO están integrados en un único programa. Son difíciles de modificar (ejemplo: primeros sistemas Unix).
  • Modular: El SO se organiza en módulos que pueden ser cargados o descargados según sea necesario (ejemplo: Linux con módulos dinámicos).
  • Por capas: Organiza el SO en una jerarquía de capas, donde cada capa interactúa únicamente con la capa superior e inferior (ejemplo: algunos sistemas Unix).
  • Micronúcleo: Solo el núcleo esencial del SO se ejecuta en modo privilegiado; el resto de las funciones están en procesos de usuario (ejemplo: sistemas QNX). a

6. Por tipo de desarrollo

  • Cerrados: Desarrollados y mantenidos por una única entidad, sin acceso al código fuente para modificaciones externas (ejemplo: Windows).
  • Abiertos: Su código fuente está disponible para la comunidad, permitiendo modificaciones y adaptaciones (ejemplo: Linux).